La tecnología educativa como un factor de desarrollo de los países- realidad o utopía.

La revolución educativa está de la mano con el desarrollo tecnológico de cada país no se pretende ser experto en una educación actualizada si no se cuenta con las herramientas tecnológicas propias para estar a la vanguardia de cada estamento nacional y mundial. La tecnología educativa como un factor de desarrollo en los países como  Colombia es una realidad para algunos, ya que  existen políticas públicas educativas en ciencia y tecnología, que apuntan a “Implementar una política pública que fomente el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación entre las diferentes instituciones, niveles educativos y sectores.” además a  “Fortalecer procesos pedagógicos que reconozcan la transversalidad curricular del uso de las TIC, apoyándose en la investigación pedagógica.” Entre otras.

Desde la creación del ministerio de las TIC se le da la relevancia necesaria a la tecnología educativa para sobresalir al igual que otras áreas de enseñanza es por eso que la capacitación constante sobre la tecnología en Colombia es cada día más importante es a partir de estas políticas educativas que surgen gran variedad de planes y programas como estrategias para alcanzar las metas propuestas, sin embargo estos programas en muchas ocasiones resultan insuficientes ya que son muchas las instituciones educativas que aún no cuentan con infraestructuras óptimas y bien dotadas de recursos tecnológicos, así como con una conectividad permanente y de calidad. Igual ocurre con las formaciones en TICs para los docentes, lamentablemente aún hay docentes que no se sienten seguros al momento de implementar las TICs en sus prácticas educativas, así que a veces optan por no usarlas, por estas razones a pesar de que hay muchas propuestas en el papel, son muchas las falencias que aún existen en la práctica, es por esto que para otros, la tecnología educativa como un factor de desarrollo en Colombia es una utopía, es decir que,  a pesar de que este país está caminando por el sendero de la tecnología educativa, aún es mucho lo que le falta por recorrer, y esto depende únicamente de la voluntad y el compromiso de la sociedad en general para crear, hacer seguimiento y evaluar sus políticas públicas en educación.